jueves, 22 de junio de 2023

Lagarto bético (Timon nevadensis)

Esta vez nos adentramos un poco en las épocas calurosas para hablar acerca de un animal de sangre fría, el lagarto bético (Timon nevadensis) . Este reptil habita en las regiones sureñas, pero sobre todo en el sureste de nuestra península, pudiendo encontrarlo tomando el sol en zonas abiertas con vegetación arbustiva o semidesértica, aunque habita prácticamente en todos los hábitats presentes en el sur. Es habitual en verano toparnos con ellos en rocas elevadas, carreteras, caminos y zonas de paso.




Anteriormente, este animal se consideraba una subespecie del lagarto ocelado (Timon lepidus), pero más tarde, estudios taxonómicos y filogenéticos han situado al lagarto bético como una especie independiente. Principalmente se diferencian en que los ocelos son más claros en el lagarto bético que en el ocelado, en la cabeza que es ligeramente más estrecha y en que no presenta escamas oscuras en el dorso, como sería el caso del lagarto ocelado.

Es un animal grande, que puede llegar a alcanzar los 70 cm de longitud. Su alimentación se basa en todo tipo de invertebrados, aunque puede llegar a depredar algunos vertebrados como lagartijas o ingerir algunas bayas o frutos. 


En cuanto a la coloración, va variando según la edad, encontrando a los juveniles de color marrón oscuro o verde intenso y manchados de ocelos blanquecinos con aureolas negras distribuidos por todo el dorso, y a los adultos con una coloración más grisácea, con escamas verdes claras sobre el dorso y con sus ocelos azulados en los flancos. Además, durante su época de celo pueden volverse de un verde más intenso. 


Su principal amenaza reside en los atropellos, ya que suelen colocarse en zonas asfaltadas para tomar el sol. Se encuentra en la categoría de conservación de "Casi amenazado".

No hay comentarios:

Publicar un comentario